Pasa muy a menudo, triunfar o simplemente ser mejor aceptado lejos de casa. Un poco es lo que les está pasando a los emprendedores alcoyanos Toni Alós y Pau Aznar. Su proyecto “Cerveses Spigha” está encontrando más llano su camino por fuera de la tierra que la ve nacer.

No sé si por la cultura del café licor implantada en la zona (elemento para psicoanalizar aparte), o puede ser por ese tópico que explica como las modas gastronómicas entran en España por Madrid y Barcelona, dos o tres años después pasan a las capitales de provincia y aquí en Alcoi llegan todavía después. Por una cosa, por la otra o por las dos, la verdad es que la cervesa alcoiana está cosechando buenos frutos fuera de la olla Alcoyana. Lo ha hecho también trabajando en colaboración con otras empresas, con la cooperativa de Altea “Frutaltea” ha elaborado “Nispra”, una cerveza con adición de Nispero, un toque frutal y dulce muy acertado. Con otros colaboradores ha desarrollado su Winter Ale (Elaborada con especias y frutas) y ahora ha sido el turno de coffee Porter, con doble maceración con café. Aparte de esto también elaboran otras marcas para otras empresas de diferentes puntos del mapa de la península.

El caso es que la cultura de la cerveza artesanal no acaba de encontrar de momento su hueco en la vida gastronómica Alcoyana. En los restaurantes no se encuentra oferta de cervezas artesanales, no hay una apuesta por ello, y lo tendrían muy fácil, al lado de casa. Tampoco se prodiga su oferta en el resto de establecimientos de la ciudad (y por extensión de la comarca). Entendemos que cuando las cosas no pueden ir a menos deben de tender de ir a más, no queda otra. Tiempo al tiempo.

Poco a poco hay que dar a conocer estás cervezas, nos esforzamos por hacer entender que no se deben tratar de entender como cervezas comerciales al uso, a veces acabo por explicar que hay que entenderlas como algo más cercano al mundo del vino que al de la cerveza comercial.

Las cervezas artesanales, por su intensidad, por su aroma, pueden tomarse en anchas copas de vino, son, como el vino, de trago corto y tienen, como el vino, su propio ritual a la hora de conservarlas y a la hora llevarlas a la copa.

De momento es lo que hay, triunfar lejos de la tierra y ser profeta en otras latitudes. No obstante los resultados demuestran como la cerveses Spigha está haciendo bien las cosas y está consiguiendo productos de calidad y con mucha personalidad.

Con todo esto la gama propia de la Cerveses Spigha se compone ya de seis referencias diferentes:

Na Valora. Una cerveza rubia superlupulizada, intensa, sabrosa y auténtica

Gurugú.

Con una proporción del grano muy tostado, de color rojizo y matices aromáticos más torrefactados.

Voramar.

Es la más amable y suave de todas, la más fresca y descarada

Nispra.

Un pequeño aporte de níspero para lograr una cerveza peculiar y agradable

Winter Ale.

Nació para vivir en invierno, pero su éxito y aceptación ha hecho que se quede con nosotros todo el año. Orejones y pimienta en su receta.

Coffee Porter.

Cerveza negra con el aporte de la maceración con granos de café. Muy personal y sabrosa, no te dejará indiferente.

La cultura de la buena cerveza artesanal ha arraigado en buena parte del territorio nacional, entendemos que es una cosa que tarde o temprano acabará por cuajar también en nuestro
ámbito. Nosotros, por nuestra parte, estamos preparando un futuro evento que girará alrededor de estas cervezas artesanales. Ya os lo haremos saber.